La arquitectura es sensorial, hay que sentir el espacio. Una casa de playa debe oler a mar, dejar que la brisa la atraviese. Esa es el alma de Casa A&B.
En una empinada ladera sobre la laguna de Praia do Rosa, esta casa imita el paisaje, tanto en los colores de la piedra y la madera como en la transparencia del vidrio. La selección de materiales añade un alto confort y durabilidad, con un fácil mantenimiento.
La terraza sobre la casa refuerza la función principal del proyecto: un espacio donde contemplar la vista panorámica del mar inspira y calma.