Semana del Arte 2019
Semana del Arte 2019
Recientemente, en Fronteras del Pensamiento, el psicoanalista Calligaris provocó: "seamos ligeros sin ser frívolos". Lo adoptamos como un reto y lo complementamos: "seamos contemporáneos sin estar anticuados". Tomamos prestada del arte su capacidad para crear diálogos silenciosos. Temas que se evaporan de nuestras pantallas tras provocar inundaciones multiplataforma. Olvidado demasiado rápido. Hay quienes pretenden no haber visto. Hay quienes olvidan intencionadamente para seguir. Polémica. Polarización. Un tipo de contraste que no revela lo mejor de su opuesto complementario. A medida que se acerca el final del año, vemos que debemos replantearnos. Para sentir. Para sentir. La delicadeza del arte es un lenguaje amable para tratar con respeto la seriedad de los temas de nuestra retrospectiva. Invitamos a una relación más profunda con nuestro entorno. Una relación que cuestiona la fugacidad, la memoria y la permanencia.
Ingrid Stemmer
En su cuarta edición, la consolidada Semana de Arte Stemmer Rodrigues marcó la finalización y entrega del Poema Petrópolis, en la Av. Encantado 344. La muestra reunió obras de renombrados artistas de Rio Grande do Sul, comisariada por Ingrid Stemmer. La colección aporta esculturas, lienzos, grabados y piezas de decoración y mobiliario. Del dadaísta Duchamp, tomamos prestadas la ironía y la metáfora para crear encuentros insólitos: tiempos contrastados, plataformas divergentes, técnicas opuestas, pero que comparten la humanidad visceral de sus creadores. Incluso nos permitimos nuestra propia relectura de la famosa escultura La Fuente que, aquí en la oficina, tomó aires tropicales.
Coincidencia o reflejo del espíritu de la época, nuestra provocación se produjo unos días antes de una ironía aún mayor que tuvo repercusión en Art Basel Miami: en la galería francesa Perrotin, el italiano Maurizio Catellan causó un revuelo al exposición de tres plátanos fijados a la pared con cinta adhesiva. Dos de ellos se vendieron, respectivamente, por 120.000 y 150.000 dólares. La intención del artista era precisamente satirizar la relación de la hipérbole y la superficialidad pasajera con el arte, la economía y los relatos que los sustentan.
De vuelta a Petrópolis, la obra que forma parte de la colección permanente de Poema es del escultor de Porto Alegre Rogério Pessoa. Las esculturas, de más de 2 metros de altura, están fundidas en hierro y cerámica y fueron el punto culminante de la Bienal de Mercosur y ahora embellecen la tranquila calle de Petrópolis.
Fahrion, Radaelli y Grassman visitan el vestíbulo con sus óleos en una serena amistad entre el trazo expresionista del pincel y el minimalismo contemporáneo de la arquitectura que los acoge.
Inés Schertel y Selma Calheira, cuyo trabajo utiliza técnicas milenarias de telar y cerámica, prestan cestas y esculturas de arcilla a la colección. Desde el Amazonas, la artesanía de las tribus indígenas desempeña un papel destacado en la brasileñidad y el patrimonio cultural.
Guto Índio da Costa y Guilherme Wentz aportan piezas de decoración y mobiliario extremadamente minimalistas y contemporáneas con una fuerte huella atemporal. La arquitecta Carolina Petersen pintó murales especialmente para la ocasión, junto con sus retratos dibujados y una arboleda de bonsáis de la Associação Bonsai Sul alineó piezas de extrema belleza y contemplación.
La Semana del Arte también marcó el lanzamiento del Pendureiro, un perchero diseñado por Ingrid Stemmer. Es la primera pieza de la serie Objetos Felizes, una colección de piezas diseñadas por S&R cuyos ingresos por ventas se revertirán íntegramente a organizaciones benéficas. La percha es fabricada por San German y vendida por Casa de Alessa. Otro objeto que, insólitamente, alegró a todos fueron las bicicletas ecológicas, un regalo de S&R a los residentes de Poema como incentivo para una vida más ligera y sostenible.
